Versión Español:
En mil novecientos quince,
Jueves Santo en la mañana,
salió Villa de Torreón
a combatir a Celaya.
Por la derecha y izquierda
iba la caballería:
por el centro de las tropas
iban los de infantería.
Corre, corre, maquinista,
no me dejes ni un vagón,
vámonos para Celaya
a combatir a Obregón.
Ese tambor que se oía
era de los carrancistas
que combatían con valor
a los valientes villistas.
Ángeles era valiente,
no le temía a la metralla,
le pidió permiso a Villa
para bombardear Celaya.
Le contestó Pancho Villa:
-Hombre, no seas imprudente,
si bombardeamos Celaya
perecen los inocentes.-
Decía don Francisco Villa:
-Está muy mala la cosa,
ya están cayendo soldados
del batallón Zaragoza.-
De Salamanca a Irapuato
hay quince leguas a León,
fue donde perdió su brazo
el general Obregón
No le temía a los cañones,
ni tampoco a la metralla:
aquí doy fin al cambate
de la toma de Celaya.
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English Version:
In nineteen-fifteen,
the morning of a Holy Thursday,
Villa set out from Torreón
to fight in Celaya.
The calvary was flanking
to the right and to the left
with the infantry
in the middle.
Hurry, conductor, hurry and
dont leave any wagons behind,
lets go to Celaya
and fight Obregón.
That drum that was heard
belonged to Carranzas people
who valiantly fought against
the courageous men of Villa.
Ángeles was a brave man
who didnt fear the bullets:
he asked Villas permission
to fire on Celaya.
Pancho Villa answered him:
Listen, dont be reckless,
if we fire on Celaya
innocent people will die.
Don Francisco Villa would say:
This is really bad,
we are even losing soldiers
from the Zaragoza battalion.
From Salamanca to Irapuato
there are 15 leagues to León,
thats where General Obregón
lost his arm.
He didnt fear the cannons
nor the bullets,
here I end the battle
of the assault on Celaya.
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